Turistas gringos dan fe de hospitalidad mexicana luego del huracán Odile: Mexican power

 

 

 

Su experiencia comenzó cuando el agua comenzó a ingresar a su habitación. "Fue una de esas cosas en las que uno piensa que va a ser el final de tu vida ... realmente fue así", dijo Rachel este lunes a la estación de televisión WFAA de Dallas.

"Su única alternativa era subirnos en los autobuses y conducirnos hacia el norte, hasta el sur de California, y cruzar la frontera y llegar a San Diego", dijo Jamey.

El autobús, lleno de turistas, tuvo que esperar 30 horas a que las aguas del arroyo bajaran, durante las cuales recibieron apoyo de la población.

"Nos hicieron comida, café, hot-dogs, tacos (...) nos proveyeron de todo", dijo Rachel. "Ellos ni siquiera tenían nada, y ellos hicieron todo lo posible".

“Un hombre se arriesgó con su propia máquina excavadora (bulldozer) y eso lo cambió todo. La puso en el arroyo, sin saber si iba a funcionar, si iba a perder su propio equipo, y lo hizo para llevarnos a través del caudal para volver con nuestras familias”, relató Jamey.

El autobús llegó a San Diego la noche del viernes, y la pareja regresó a su casa el sábado, llenos de gratitud y con una nueva perspectiva.